Luc Van Lierde: la apuesta ganadora de Colnago

Su éxito más importante es, sin lugar a dudas, la victoria en el Ironman de Hawái de 1996. Un objetivo que le ha catapultado al Olimpo de los grandes del deporte del triatlón. Nacido en Brujas (Bélgica), Luc Van Lierde fue el primer triatleta europeo en romper el dominio de los atletas estadounidenses en el gran evento de Kona, el Ironman más famoso y conocido de todo el mundo. Un verdadero campeonato mundial sobre esa distancia organizado por una entidad privada (Ironman precisamente) y no por una federación.

Un espectáculo increíble, ese triatlón, construido sobre la estética de una isla única, el mito del hombre del acero y mucho esfuerzo. Prácticamente ocho horas de competición, para los mejores triatletas profesionales, que tienen lugar en condiciones de calor y humedad extremas, que añaden dificultad a una competición ya de por sí exagerada en todos los puntos de vista, compuesta por 3,8 km de natación, 180 km de bicicleta y la maratón final.

Distancias que conforman al hombre de hierro, el deportista más fuerte que cualquier otro. Si a esto le añadimos que Van Lierde ganó el título como "novato", es decir, en su primera participación en esa carrera, podemos entender bien el valor de esa actuación. Pero no ha terminado aquí, ya que el belga corrió en un tiempo récord estableciendo un tiempo final de 8:04:08, superando así, en tres minutos, el récord precedente establecido por el estadounidense Mark Allen en 1993. Mark Allen que era, y sigue siendo, un mito de este deporte, especialmente en Kona, ¡una carrera que ganó nada más y nada menos que seis veces!

1995 fue un año decisivo para Van Lierde, ya que ocupó el segundo lugar en el Campeonato del Mundo ITU de Niza y el segundo en el Campeonato de Europa de Triatlón en distancia olímpica. Una especie de impulso ideal para 1996, año en el cual ganó el Campeonato de Europa y terminó segundo en el Campeonato del Mundo de Triatlón en distancia olímpica en Cleveland, gana el Triatlón de Niza y termina segundo en el Campeonato ITU de larga distancia.

El que habló a Colnago de Van Lierde fue un amigo belga que le había hablado sobre este fenomenal atleta que estaba creciendo en un deporte en auge en los gustos de los deportistas, en especial de los estadounidenses. Un paspartú perfecto para acercarse al mercado con estrellas y rayas de los ricos triatletas. A Van Lierde le entregan dos bicicletas, una de entrenamiento y otra para la competición, de contrarreloj. En ese momento aún no había diferencia entre una bicicleta de "triatlón" y una de contrarreloj tradicional; por lo tanto, el campeón belga recibe una Oval Cx Krono desarrollada gracias a los éxitos de Rominger en carretera y en pista.

Cuadro de acero con rueda delantera de 26 pulgadas y rueda trasera de 28, cambio Shimano Dura ace completo con cintas de las palancas de cambios en la parte superior del manillar aerodinámico (Grip shift) y ruedas de la marca francesa Corima. Una bomba de bicicleta, ligera y cómoda (de acero en vez de carbono) que puede apoyar mejor a Van Lierde en la larguísima parte de ciclismo del Ironman y permitirle salir de la bici y empezar a correr con la espalda relativamente descansada. Para el entrenamiento, en cambio, Van Lierde pedalea en una Bititan, otro cuadro en boga gracias a la actuación del campeón suizo Tony Rominger.

La victoria como novato de Kona seguirá siendo su joya de la corona, junto con el doblete de 1999, seguido por el récord en distancia de Ironman en 1997, con un tiempo de 07:50:27 en Roth, Alemania.